top of page

Beatriz Elizalde

"Inicié a tejer porque un círculo de amigos se reunía a eso cada lunes; ellos fueron el pretexto para hacer la primera cadenita. Ahí, la maestra se volvió mi amiga, y en cada punto nuevo le agradezco que siga con la paciencia hacia conmigo, quien siempre enreda los estambres por arte de magia.

Encontré en el tejido un símil que comparé con lo que debía ser vivir, me parece: si te equivocas, siempre puedes volver a empezar. Y en cada cadena, círculo mágico, reducción y aumento una intención por dejar un recuerdo entre hilos para quien recibe el resultado de mi tejido. Tejo porque aprendí que puedo hacerlo, porque quiero y me gusta; tejo porque cada vuelta es una sorpresa que no sé cómo terminará".

bottom of page